jueves, 2 de febrero de 2012

EL EROTISMO "RUBIO" DE HITCHCOCK


Las mejores "rubias Hitchock" al completo.
Mucho se ha hablado del fanatismo que el director británico y mago del suspense, Alfred Hitchcock sentía hacia las mujeres rubias, de aspecto distante, inalcanzable y gélidas como el hielo. A la memoria de todos nosotros acuden figuras como Grace Kelly, Kim Novack o Tippie Hedren, entre muchas otras, no en vano, en casi todas sus películas aparecía bien como protagonista o bien como tentadora partenaire del galán, una de estas mujeres refinadas, elegantes y pijas, con sus impecables peinados de color platino. Pero... ¿Por qué le llamaban tanto la atención al orondo director las mujeres rubias? ¿Por qué para casi todos los roles femeninos contrataba a una actriz de semejantes características? Ya en una de sus primeras películas, "El enemigo de las rubias" rodada en 1927, Hitchcock comenzaba a mostrar dicha obsesión por el color rubio en el cabello de las damas.



En el libro-entrevista que François Truffaut realizó junto con Hitchock, "El cine según Hitchcock", ambos hablaban sobre el erotismo en el cine de éste último y qué simbolizaba para él la mujer rubia:

François Truffaut - Fue en Atrapa a un ladrón cuando los periodistas se interesaron por su concepción de la heroína cinematográfica. Usted ha declarado en varias ocasiones qué Grace Kelly le interesaba porque, en ella el sexo era "indirecto". 

Alfred Hitchcock - Cuando abordan cuestiones sexuales en la pantalla no olvido que, también aquí, el suspense lo es todo. Si el sexo es demasiado llamativo y demasiado evidente, no ha el suspense. ¿Por qué razón elijo actrices rubias y sofisticadas? Buscamos mujeres de mundo, verdaderas damas que se transformarán en prostitutas en el dormitorio. La pobre de Marilyn Monroe tenía el sexo inscrito en todos los rasgos de su persona, como Brigitte Bardot, lo que no resulta muy delicado. 

François Truffaut - Sí, y creo que las mujeres más interesantes, sexualmente hablando, son las mujeres británicas. Creo que las mujeres inglesas, las suecas, las alemanas del Norte y las escandinavas son más interesantes que las latinas, las italianas o a las francesas. El sexo no debe ostentarse. Una muchacha inglesa, con su aspecto de institutriz, es capaz de montar en un taxi con usted y, ante su sorpresa, desabrocharle la bragueta.

Y hablando sobre la película "Vértigo", añadían:

Alfred Hitchcock - Es la situación fundamental del film. Todos los esfuerzos de James Stewart para recrear la mujer, cinematográficamente son presentados como si intentara desnudarla en lugar de vestirla. Y la escena que más me interesa es cuando la muchacha vuelve después de haberse teñido de rubia. James Stewart no está completamente satisfecho, por qué no se ha peinado el cabello formando un moño.¿Qué quiere decir esto? Quiere decir que está casi desnuda ante el, pero todavía se niega a quitarse la braguita. Entonces James Stewart se muestra suplicante y ella dice "está bien, de acuerdo", y vuelve al cuarto de baño. James Stewart espera. Espera que ella vuelva desnuda esta vez, dispuesta para el amor. 

François Truffaut - (...) Todo ese aspecto erótico del film es apasionante. Pienso en otra escena hacia el principio, después de que James Stewart repesca a Kim Novak, que se había arrojado al agua. La volvemos a ver en casa de James Stewart, acostada desnuda en la cama. Entonces, ella se despierta y eso nos demuestra que él la ha desnudado, que la ha visto desnuda, y sin que en el diálogo se haga referencia alguna a ello.. El resto de la escena es extraordinario, cuando Kim Novak se pasea con la bata de Stewart , cuando se ven sus pies desnudos deslizarse por la alfombra y cuando James Stewart pasa una y otra vez por detrás de ella. Hay en Vértigo cierta lentitud, un ritmo contemplativo, que no se encuentra en sus otros films, a menudo construidos sobre la rapidez, la fulguración.

Cartel de "El enemigo de las rubias"
rodada en  Londres en 1927
Pero a pesar de su clara tendencia hacia las rubias, famosa es la frase aquella de "Hitchock las prefería rubias pero se casó con una morena", y no sólo eso si no que también hubo algunas fantásticas actrices morenas que llegaron a ser "chicas Hitchcock" como fue el caso de las siguientes:

Judith Anderson en "Rebecca" (1940)

Diane Baker en "Marnie, la ladrona" (1964)

Alida Valli junto a Gregory Peck en "El Proceso Paradine" (1947)

Teresa Wright en "La sombre de una duda" (1943)

También nos encontramos en algunas de sus películas, con un erotismo macabro como fue el caso de "Frenesí" o psicológico como plasmaba en la obsesión que James Steward sentía hacia la Madeleine intrerpretada por Kim Novak  en "Vértigo", o la que mostraba Norman Bates (Anthony Perkins) hacia la fugitiva Janeth Leigh en "Psicosis" o el trauma sexual que sufría Tippie Hedren en "Marnie".

5 comentarios:

Anónimo dijo...

he visto en tu blog de Soy lo que leo que tienes puesto a Herman Hesse. Leiste su novela de Shidarta?, sta muy bien.
Te pongo aquí el comentario pk no puedo escribirlo en el otro blog.
Miki, salu2

CAROL LEDOUX dijo...

Hola Miki. Pues tengo ese libro en mi casa, pero reconozco que es una de sus obras que aún me quedan por leer.

Te haré caso y seguiré tu recomendación. Gracias ;)

Anónimo dijo...

Hola quimerica inquilina. Tengo un documento de power point de fotos super chulas que le vendrian que ni pintado a tu blog, supongo yo.
ya me dices si te interesa para enviartelo, no se como,jej.
Miki.salu2

CAROL LEDOUX dijo...

Hola Miki! Muchísimas gracias, si quieres, puedes enviármelo a Tamararc@gmail.com

Eres muy amable!!!


Un beso y gracias!

Lo que Coppola quiera: Blog de cine dijo...

Excelente post. Me encanta el libro "El cine según Hitchcock", me lo habré leido ya 3 ó 4 veces. Ahí sí que se aprende cine ;-)
Saludos,
Eduardo Muñoz